Benjamín Alarcón (19), también conocido como Yung Represalia, es productor desde los 13 años y cantante de trap desde que cambió la voz. Sacó a principio de año un mixtape titulado: Love or Death, y ya cuenta con su propio sello: SvN Records. En sus canciones relata su propia decadencia, y la pena que significa para él vivir envuelto en la violencia y los vicios que se pueden dar en las poblaciones.
Entrevista por Hristo Matus
¿Alguna vez has trabajado?
¿Trabajado? no hueón, nunca. Esa es la idea, no tener que trabajarle un peso a nadie y ganar plata de verdad.
El “Yung” lo entiendo, es la chapa de trap, ¿qué me puedes decir del Represalia?
Represalia viene a simbolizar la intensidad, por ejemplo: ¿qué es la represalia? Para mí, es más que una venganza, o tiene una connotación más callejera, de actos hechos por pandillas. Y no sé, pensé en todas las hueás que me han pasado en la vida y decidí usar este nombre como para darlas vuelta, una revancha. También soy BEXVl (V16) y El Desgraciado.
Además de rapear también produces canciones a través de SvN Records, ¿qué tal ese rubro?
Es bueno, pero le produzco a gente que no es tan conocida. Igual, produzco más de lo que rapeo.
¿Qué me puedes contar de “La Pacsilvania”?
La Pacsilvania es el lugar en el que nací y crecí, es mi hogar. Pedro Aguirre Cerda. Pero Pacsilvania es una forma muy común de referirse a esta comuna entre nosotros mismos. Siempre se le ha dicho así en mi familia, mis vecinos, y por eso lo ocupo tanto en mis canciones. Además mi papá es rapero, y él ya lo usaba antes que yo. Y me suena a un lugar con tinieblas, por eso nos hará sentido.
Dijiste que tu papá rapeaba ¿era un rapero aficionado?
Mi papá firmó con Sony y MTV, rapeaba en Rezonancia. Mi papá es vieja escuela del hip hop chileno. Igual se hicieron sus monedas pero después se separaron, ahora él trabaja solo.
¿Qué opina sobre tu trabajo en el trap?
Nada, me dice: pórtate bien cabro culiao. No pero en serio, sobre mi música nunca he tenido una opinión directa, pero sé que igual le gusta. Le he producido canciones.
¿Nunca le has preguntado directamente?
No, pero a veces lo pillo cantando mis canciones, o me huevea cantando: enamorado de la perra cocaína.
¿Tu relación con él es buena?
Sí, pero tiene muchos altos y bajos. A veces podemos estar muy, muy mal. Hemos llegado a tener altercados físicos.
¿Nunca se te pasó por la cabeza estudiar algo luego de salir de la educación media?
Sí, en algún momento se me pasó por la cabeza estudiar, pero con mis notas no podía hacer nada. Me volaba caleta además, y ya andaba en hueás turbias. Pero tenía a la música, aunque no sabía que eso era lo mío. En ese entonces debí tener catorce o quince años.
¿Partiste con el rap?
Partí con la electrónica, música electrónica que trataba de combinar con trap. Pero siempre encontré que era muy fome apreciar esa música. Entonces decidí que iba a rapear, pero no todavía. Tenía que tener voz de hombre para que no se rieran de mi hueá. A lo choro. Entonces a los 16 cambié la voz y empecé a grabar. Empecé grabando con el celu.
¿Qué partiste escuchando? ¿Cuál fue el proceso para llegar al trap?
Puta no sé. Supongo que tengo el trap y su sonido internalizado desde que tengo memoria. Mi papá rapero, mi mamá escucha reggae; en ese sentido las pistas del reggae siempre han sido con hit hat, no era un boom bap clásico de hueás como Cypress Hill. Entonces cuando quise sacar música ya sabía qué hacer.
¿Cuál es tu proceso creativo?
Me pego un saque, me tomo una chelita y empieza el proceso creativo de escribir. Solo mi canción Lágrimas de diamante la hice lúcido. Me encerré tipo cuatro de la tarde y a las cuatro de la mañana ya estaba listo. Me gusta mucho esa canción.
A veces cuando hago canciones duro o copeteado salen puras hueás, puedo rescatar una o dos cosas, o salen canciones muy azarosas.
En una canción, no recuerdo cuál la verdad, dices que a veces se te mira en menos: ¿En qué circunstancias consideras tú que te miran en menos? ¿Por qué?
A veces pasa que para los papás de mis amigos soy el diablo, y me odian. También he sido el diablo para las familias de las minas con las que he andado. Para todos soy el diablo.
¿Haces alguna clase de reparo con el trap más pop?
No tengo ningún problema, no me molesta pero… ¡qué pena! (se ríe). Mentira, uno es libre de hacer lo que quiera. Pero si nunca has vivido situaciones de tal manera, no puedes cantar sobre eso, o quizás sí, pero si estás acostumbrado a otro ambiente mejor haz tu arte sobre eso que mejor conoces.
Y sobre los que ya son demasiado comerciales, se ahueonan (se ríe). Por ejemplo, los puertorriqueños que están repitiendo solo una palabra todo el rato, -para mí- eso es estúpido, un meme. Ahí siento que están desaprovechando el género. Da para innovar mucho más, y hacer ese trabajo es mediocre.
¿Qué aspectos positivos y negativos le ves al trap?
Se puede jugar mucho con todo. Ahora el trap tiene muchas variantes y van a seguir saliendo más. La música es ilimitada.
Lo negativo es que hay muchos hueones malos haciendo trap, y lo desgastan. Y lo peor es que suenan de todas maneras. Por culpa de los malos quedamos todos mal. Por ejemplo, le digo a alguna persona que no está acostumbrada a los sonidos que yo: oiga, yo hago trap, (Yung Represalia se pone a habla con voz de abuela) como ese niño ¿Bad Bunny?
A veces me dicen: buena Lil Pump, por los tatuajes en la cara, y yo: ¿Sí? ¿Lil Pump conchetumare? Dímelo de nuevo. Ese es el problema con el trap, que lo asocian con muchos hueones giles.
¿Tú haces arte?
Todos hacen arte. En cada persona hay algo que puede ser artístico, los lugares son escenarios.
Pero la comuna de Pedro Aguirre Cerda es seca, gris…
Pero no el cielo (se ríe).